Coloca la harina en un tazón grande y haz un pozo en el centro. Casca los huevos dentro del pozo; bate suavemente los huevos con un tenedor hasta que estén mezclados, luego usa el tenedor para incorporar gradualmente la harina de los lados. Mezcla hasta que toda la harina se haya incorporado.

Coloca la masa sobre una superficie enharinada; amasa hasta que esté suave y elástica (3 a 4 minutos). Cubre con plástico y deja reposar al menos 20 minutos.

Mezcla el ricotta, la mozzarella y el parmesano en un tazón para el relleno. Bate el agua y el huevo en otro tazón para el barniz de huevo.

Lleva una olla grande de agua salada a ebullición.

Extiende la masa en una hoja fina; corta con un cortador de galletas en forma de corazón. Pinta los bordes de cada corazón con el barniz de huevo. Coloca el relleno en el centro de la mitad de los corazones. Coloca los corazones restantes, lado del barniz hacia abajo, sobre el relleno; presiona los bordes para sellar.