Precalienta el horno a 375 grados F (190 grados C).

Coloca 3 cucharadas de mantequilla en un tazón apto para microondas y caliéntala en el microondas hasta que se derrita, de 1 a 2 minutos. Aplasta los dientes de ajo con el lado de un cuchillo de chef y añade el ajo a la mantequilla caliente. Mezcla el jugo de limón y la cebolla en polvo; reserva.

Espolvorea ambos lados de los muslos de pollo con sal y pimienta. Calienta la cucharada restante de mantequilla en una sartén apta para horno a fuego medio-alto. Dora el pollo, con la piel hacia abajo, durante 3 a 4 minutos. Voltea el pollo y unta la piel con la mezcla de limón y mantequilla. Vierte la mezcla restante de mantequilla en la sartén y retira del fuego.

Hornea en el horno precalentado hasta que el pollo ya no esté rosado cerca del hueso y los jugos salgan claros, aproximadamente 30 minutos. Un termómetro de lectura instantánea insertado cerca del hueso debe marcar 165 grados F (74 grados C). Unta la piel cada 10 minutos con los jugos de la sartén.