En un tazón mediano, mezcle la harina y 1/4 de cucharadita de sal. Añada la mantequilla con un tenedor o cortador de masa hasta que la mezcla tenga una textura similar a las migas de pan. Agregue el agua fría con un tenedor hasta que la mezcla pueda formar una bola. Amase un par de veces y luego divida la masa en dos partes. La masa puede refrigerarse para usar más tarde en este punto.

Precaliente el horno a 400°F (200°C). Sobre una superficie ligeramente enharinada, extienda cada mitad de la masa en un círculo de 10 pulgadas.

Coloque la mitad de las rodajas de papa en una línea por el centro de cada círculo, dejando al menos 1 pulgada en cada extremo sin cubrir. Coloque las rodajas de cebolla sobre las papas y sazone con sal, pimienta y algo de perejil seco. Coloque la mitad de los cubos de carne sobre cada capa de cebolla, luego sazone nuevamente con sal, pimienta y perejil seco. Doble los bordes de la masa sobre el relleno y asegure los extremos.

Transfiera los dos pasteles a una bandeja para hornear engrasada y haga unos cortes en la parte superior de cada uno para permitir la ventilación.