Corta el cordel del carnicero en 5 o 6 trozos de 8 pulgadas. Envuelve cada pieza firmemente alrededor del lomo, espaciadas a unos 3.8 cm de distancia, y asegúralas con un nudo. Recorta cualquier exceso de cordel. Corta un trozo más largo de cordel y envuélvelo horizontalmente alrededor del lomo; pasa los extremos por debajo de las piezas centrales y ata un nudo firme en el centro. Recorta cualquier exceso. Refrigera el lomo durante 30 minutos sin cubrir.

Precalienta el horno a 325 grados F (165 grados C). Coloca una rejilla dentro de una bandeja para hornear con borde.

Sazona el lomo uniformemente con sal y pimienta. Calienta el aceite en una sartén grande a fuego medio-alto. Coloca la carne en la sartén y cocina sin mover hasta que esté dorada, de 4 a 5 minutos. Dale la vuelta y repite en todos los lados hasta que esté uniformemente dorada. Transfiere el lomo a la rejilla preparada.