Precalienta el horno a 400 grados F (200 grados C). Forra una bandeja de horno grande con borde con papel pergamino.

Coloca las manzanas ralladas y cortadas en un tazón grande. Añade el azúcar moreno, las pasas doradas, la harina y la sal; reserva.

Trabajando con una lámina a la vez, coloca el hojaldre sobre una superficie ligeramente enharinada. Extiende ligeramente con un rodillo hasta formar un rectángulo de aproximadamente 10 x 12 pulgadas. Coloca 1/2 del relleno de manzana (aproximadamente 3 tazas) a lo largo de uno de los lados de la masa.

Dobla la masa longitudinalmente sobre la mezcla de manzana; humedece los bordes de la masa con agua, luego presiona o aprieta los bordes para sellar. Repite el proceso con la segunda lámina de masa y el resto del relleno de manzana.

Transfiere a la bandeja de horno preparada, dejando al menos 2 pulgadas entre cada masa. Bate el huevo y la leche juntos en un tazón pequeño; pincela encima de cada masa. Haz 3 o 4 cortes en la parte superior de cada masa para permitir que escape el vapor.

Hornea en el horno precalentado hasta que esté dorado, de 30 a 35 minutos.