En un tazón mediano, mezcla el agua tibia, la margarina derretida, el azúcar y los 3 huevos batidos.

En un tazón grande, mezcla la levadura, la sal y 7 tazas de harina. Añade gradualmente los ingredientes líquidos y mezcla hasta que la masa se mantenga unida.

Amasa en una superficie enharinada con la harina restante hasta que quede suave.

Divide la masa en 2 piezas grandes. Divide estas 2 piezas en 3 porciones cada una. Enrolla cada tercio en una cuerda de 3/4 de pulgada de grosor y trenza 3 hilos juntos. Repite. Coloca la masa formada sobre bandejas para galletas engrasadas. Pinta la masa con el huevo batido restante. Agrega semillas de amapola o sésamo, si lo deseas. Deja que suba en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño.